Ya se conocen los resultados de la reciente campaña de control y vigilancia del transporte de mercancías y viajeros realizada por la Dirección General de Tráfico en la semana del 13 al 19 de febrero. Entre las conclusiones más llamativas, el descenso de denuncias relacionadas con la normativa de ITV y eventualmente el mal estado de los vehículos, que descienden del 3% del total en 2022 al 2,4% en este 2023. Una circunstancia que desde la Asociación Española de Posventa para Vehículo Industrial (AERVI) se valora positivamente, animando a los empresarios y profesionales del transporte, tanto de mercancías como de viajeros, en su compromiso con la seguridad vial desde el mantenimiento responsable de sus vehículos.
La acción, desarrollada en el marco de la asociación europea RoadPol y bajo el nombre de Operación Truck&Bus, ha supuesto el control de 22.621 vehículos, entre camiones y autocares, por parte de agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Tanto en el caso de autobuses como de autocares, se constata la progresiva contención de las infracciones denunciadas desde que comenzaron este tipo de controles, pero también que la mayor parte de ellas tienen mucho más que ver con irregularidades administrativas que con aspectos como el estado técnico de los vehículos, los tiempos de conducción, el exceso de velocidad o el consumo de alcohol o sustancias psicotrópicas por parte de los conductores. Durante los siete días que duró la campaña, 4.746 conductores de camiones y 196 de autobuses fueron sancionados por no cumplir alguno de los preceptos de la normativa.
Según los datos facilitados por la DGT mientras que como resultado de los controles de carretera efectuados por la Guardia Civil se inmovilizaron 72 camiones, por motivos atribuibles al conductor o al vehículo, pero que impedían continuar su ruta en carretera con seguridad, esta circunstancia no se produjo en el caso de ninguno de los autocares a los que los agentes echaron el alto durante los controles.
Una vez más, y pese a la insistencia en la importancia del respeto a las normas sobre las horas de conducción y descanso de estos conductores profesionales, las infracciones más numerosas fueron las motivadas por esta razón. En concreto, 1.599 conductores fueron denunciados por infracciones relativas a los tiempos de conducción (1.561 camiones y 38 autobuses) y 309 por cuestiones relacionadas con el tacógrafo (283 camiones y 26 autobuses).
A continuación, se encuentran, por un lado, las infracciones relativas a la documentación, bien del vehículo bien del conductor, que suponen que 1.168 conductores (1.034 de camiones y 134 de autobuses) circulaban con irregularidades administrativas.
En el apartado de infracciones relacionadas con la Inspeción Técnica del Vehículo, los datos facilitados por la DGT no discriminan entre las denuncias formuladas a camiones y a autocares, pero en total sumaron 556, lo que representa un 2,45% del total, una cantidad significativamente inferior a la registrada el año pasado (cuando se formularon 573 denuncias de este tipo en los apenas 19.039 controles realizados; el 3% del total).