Según el último Observatorio de Costes elaborado por el Ministerio de Transportes, se ha producido un ligero incremento del peso que los mantenimientos de los vehículos tienen sobre los costes de explotación de una flota del transporte de mercancías, concretamente de una décima porcentual.
En 2023, el mantenimiento representaba un 1,3% de los costes totales, y las reparaciones un 2,6%. Al pasar al año 2024, el mantenimiento se incrementó ligeramente llegando a un 1,4% de los costes totales con una leve disminución en las reparaciones, representando un 2,8%. Con los datos de ambos años, aunque el coste de reparaciones se haya incrementado ligeramente en términos absolutos, el enfoque proactivo hacia el mantenimiento podría estar contribuyendo a evitar reparaciones más costosas.
Mirando el panorama general, observamos que los costes directos como la amortización del vehículo, financiación, y el personal de conducción, junto con los costes kilométricos, que incluyen combustible y otros consumibles, siguen siendo los componentes principales de los gastos anuales. El combustible, especialmente, sigue siendo el mayor gasto, aunque ha habido un leve descenso del 34,5% al 30,5% del total de costes, posiblemente debido a mejoras en la eficiencia del combustible o cambios en los precios del mercado.
Es interesante señalar que, en términos de costes unitarios, el coste por kilómetro y el coste por hora han aumentado ligeramente en 2024, indicando un incremento en la eficiencia o en los costes operativos fijos.